!Oh Dios, ven en mi ayuda!
!Oh Señor, apresúrate a socorrerme!
Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo.Amén.
Dios, tú mi Dios, yo te busco,
sed de ti tiene mi alma,
en pos de ti languidece mi carne,
cual tierra seca, agostada, sin agua.
(Salmo 62)
Profesión de fe
!Oh Dios! Sé y creo que eres todo amor y que tu amor está eternamente deseoso de posserme. Entra en mí y sé mi dueño ahora, inunda todo mi ser mientras yo busco volverme a ti y estar dispuesto a recibirte. Enternece mi corazón de piedra, hazlo de nuevo, moldéalo otra vez para que en todo momento esté abierto a recibirte. "Porque jamás seré libre a menos que me seduzcas, ni tampoco casto a menos que me cautives".
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